Superheroes contra lo cotidiano

19 abril 2006

¿Has hecho ya un backup de lo que has escrito en tu blog?

Supongo que éste no es el típico comienzo de un blog, pero es porque esto no es el comienzo de un blog. Es la continuación de uno que ya existía en MSN Spaces y que inexplicablemente los impresentables de ese sitio tiraron abajo y poniendo la frasecita "Espacio no disponible, inténtelo más adelante".

Van ya casi dos meses desde que se cerró, llevo nosecuantos mails intercambiados con los del servicio técnico de MSN Spaces y, cansado de ver que mis preguntas eran respondidas con un simple corta-pega de un manual de instrucciones (ojalá os pudráis trabajando ahí con ese sueldo de mierda, pedazo de vagos), he decidido no darme por vencido y volver a empezar a poner en pie lo que perdí. Que fue mucho.

Por eso os digo: si leéis esto, haced cuanto antes un backup de todo lo que tenéis en vuestro blog. Copiad y pegad los mejores posts, los enlaces, las imágenes, TODO, en un mail y guardadlo en un correo o en un archivo. AHORA. No lo dejéis para más adelante, que esto pasa de pronto y sin avisar. Pensad cuánto tiempo habéis dedicado a vuestras cosas y pensad cómo os sentiréis si desaparecen. En serio. A mí me pasó, y puede pasarte a tí.

Después de este consejo patrocinado por la Organización de prevención del Infarto y Mala Leche por Desaparición de tu Blog, paso a presentar un poco qué es esto y por qué lo estoy montando.

Se trataba (y se trata) de organizar una campaña de rol de superhéroes, pero ambientada en España en la actualidad, tocando los temas que vemos todos los días en los telediarios: corrupción política a troche y moche, violencia juvenil, etc etc. Pero no dejaba de ser eso, una campaña de rol superheroico, con lo cual tenemos también los tópicos del género: supervillanos, incomprensión de la gente normal, conspiraciones, etc etc.

Voy a tratar de ir posteando sobre temas, según me vengan a la cabeza aquellas cosas que hice en el otro blog. No digo nada sobre intenciones de simplicidad, etc porque todos sabemos cómo acaban esas intenciones, así que mejor no mencionarlas.